29.12.09

India


“This is indeed India; the land of dreams and romance, of fabulous wealth and fabulous poverty, of splendor and rags, of palaces and hovels, of famine and pestilence, of genii and giants and Aladdin lamps, of tigers and elephants, the cobra and the jungle, the country of a thousand nations and a hundred tongues, of a thousand religions and two million gods, cradle of the human race, birthplace of human speech, mother of history, grandmother of legend, great-grandmother of tradition, whose yesterdays bear date with the mouldering antiquities of the rest of the nations—the one sole country under the sun that is endowed with an imperishable interest for alien prince and alien peasant, for lettered and ignorant, wise and fool, rich and poor, bond and free, the one land that all men desire to see, and having seen once, by even a glimpse, would not give that glimpse for the shows of all the rest of the globe combined.”

Mark Twain, Following the Equator, 1897

18.12.09

India


Una semana despues de llegar a India todavia trato de hacer un resumen de todo lo que he visto, oido, olido y tocado durante estos dias: horror, estupor, alegria, nauseas, impotencia, entusiasmo, asombro, sensualidad, ascetismo, pobreza, incredulidad pero sobretodo una indescriptible atraccion.

Es casi imposible responder a la pregunta de que me atrae de India porque cuando uno conoce este tipo de lugares, tan reales, tan violentos eso exceso de realidad se vuelve irrealidad y esa irrealidad puede transformarse una nueva vision del mundo.

7.12.09

Martes

Photo by Lam Due Hien


1. Ayer salí muy temprano de casa para evitar el trafico en la carretera y tratar de llegar a tiempo a Kampong Cham, donde inauguramos el nuevo pabellón para tuberculosos. La previsión surtió efecto y mientras desayunaba en Kampong Cham previo al acto oficial pude terminar de leer "Zama" de Di Benedetto, novela que recomiendo ampliamente, especialmente la accesible edición de Clarín de hace unos anos que tiene una muy buena introducción de Juan Jose Saer.

2. Un acto sencillo, fotos de protocolo y un nuevo pabellón de tuberculosos con capacidad para mas de 40 pacientes y varias cuartos de aislamiento para los casos de tuberculosis multiresistente. Por la tarde una buena reunión con el equipo para organizar como vamos a implementar las nuevas actividades luego de que la propuesta de re-direccionar nuestras actividades fuera aprobada por París hace un par de semanas. Como siempre, uno puede tener buenas ideas y mucha voluntad, lo difícil es como llevarlas a cabo.

3. Por la noche compre por internet dos pasajes para el tren Nueva Delhi-Jaisalmer para el domingo 13 de diciembre, definitivamente serán unas navidades distintas.

4. Esta mañana muy temprano y través de una conferencia virtual termine el curso de epidemiología que estaba haciendo en la Academia Nacional de medicina, y una vez mas volví a confirmar que tendría que tratar de validar todos estos anios de experiencia con algún estudio de postgrado en Salud Publica.

5. Ayer discutí con un traumatologo que por operar uno de mis pacientes seropositivos con una fractura de fémur nos quería cobrar el doble del precio estipulado simplemente por ser HIV positivo.

6. Acabo de leer un titular en uno de los principales diarios porteños que habla de que Evo gano la elección con mas del 65% de los votos, hecho inédito desde la década del 60 y sin ningun tipo de denuncia de fraude, al mismo tiempo el matutino hablaba de que en Bolivia hay riesgo de dictadura y una vez mas confirmo que los diarios argentinos son extremadamente mediocres y tendenciosos.

3.12.09

Casa de citas



Léon Tolstoï, 1ère photographie couleur (”autochrome”) de l’écrivain russe en mai 1908



"El secreto de la felicidad no es hacer siempre lo que se

quiere sino querer siempre lo que se hace."

TOLSTOI, León

1.12.09

Dia mundial del SIDA

Desde hace mucho tiempo creo que los argentinos formamos parte de una sociedad que se caracteriza por defender los intereses del propio bolsillo y de tener televisión por cable. Nuestra escala de felicidad esta determinada por pertenecer a un determinado grupo de elite y por tener determinados bienes materiales y básicamente la gran mayoría de nosotros sigue creyendo que todos los problemas se acaban metiendo en cana a los pibes chorros.

La estupidez, la traición, los remedios truchos, el desamor, Tinelli, Ricardo Fort solo nos confirman una vez mas que el mundo es una mierda, que la vida es horrible y no hay posibilidades de buen final ¿Cabe alguna duda?

La pasada cumbre de la “ seguridad alimentaria” de la FAO en Roma nos confirmo que hay mil millones de personas que se salvan de ver y escuchar a fenómenos de la “inteligenzia” argentina tales como Mirtha y Susana hablando de la inseguridad pero que viven con hambre y donde el Secretario General de la ONU declara sin ponerse colorado que diez chicos mueren por minuto por hambre. El hambre no vende y la cumbre paso desapercibida, solo Lula, Lugo, Mugabe, Gadaffi y una sarta de presidentes africanos que nadie conoce discutieron una rato, se sacaron fotos y dijeron que la idea es bajar a la mitad la cantidad de hambrientos para el 2015 pero no se les cayo una idea de cómo hacerlo.

Lo que viene ahora es discutir el cambio climatico en Dinamarca, que es donde van a ir los duenos del mundo con su retorica y algunos millones de dolares para calmar los animos pero donde todos saben que desde el vamos todos se van a mostrar preocupados pero nadie va a acordar nada.






Pero a pesar de tanta mierda todavía hay algunos a los que les va mucho peor, como por ejemplo a los enfermos de HIV/SIDA, a los que hoy se los recuerda a través del “World AIDS day”. Desde los anos 80 que el HIV/SIDA viene matando mas de 25 millones de personas y solamente en el ano 2008 murieron mas de 2 millones de personas dentro de las que se incluyen 270.000 chicos menores de 5 anos lo cual la convierte en una de las epidemias mas violentas y agresivas de la historia en la que a pesar de algunos avances todavía queda mucho por hacer como por ejemplo el tratamiento del HIV/SIDA pediatrico.

La inversión en programas de prevención de la transmisión del VIH de madres a hijos es imprescindible y debe ser una prioridad en la lucha contra la sida. Primero, porque permite detectar y tratar a las mujeres embarazadas seropositivas y segundo, para evitar que nazcan más niños con el virus.

El sida infantil es una de las pruebas más duras de la desigualdad entre los países desarrollados y los países con recursos limitados. En Occidente prácticamente no nacen niños con VIH porque controlando a la madre durante el embarazo, el parto y la lactancia, la probabilidad de transmisión puede reducirse a menos del 1%. Por lo contrario, en África subsahariana la mayoría de madres seropositivas ni siquiera saben que lo son, ni tienen la oportunidad de recibir tratamiento. Hoy en día, en países en desarrollo solo el 18% de las mujeres embarazadas son testadas para VIH y solamente un 34% de las VIH-positivas reciben algún tipo de medicamento para evitar la transmisión del VIH Towards Universal access Scaling up priority HIV/AIDS interventions in the health sector. World Health Organization. UNAIDS 2008. UNICEF.





Sin ningún tipo de intervención, alrededor del 40% de los hijos de madres seropositivas nacerá con el VIH. Trabajar para reducir este porcentaje, para que no nazcan más niños con VIH, es vital. Sobre todo, porque el 50% de los niños que nacen infectados mueren antes de los dos años si no reciben tratamiento.

En los países desarrollados la transmisión de madre a hijo prácticamente no existe porque se siguen una serie de medidas que permiten evitar el contagio: las madres seropositivas reciben tratamiento antirretroviral, los partos son en hospitales y hay alternativas para que la madre no dé el pecho al recién nacido. En los países en vías de desarrollo, sin embargo, los retos siguen siendo enormes. En primer lugar, por la falta de acceso a los servicios sanitarios; muchas mujeres no van a las consultas prenatales o lo hacen cuando el embarazo está muy avanzado, y la mayoría de los partos suelen tener lugar en casa. En segundo lugar, muchas veces sólo es posible dar al bebé leche materna. Además, las madres tienen que hacer frente al estigma y los programas de prevención son largos, desde el embarazo hasta el destete del bebé, y muchas mujeres no completan todas las fases programa.


20.11.09

“Continuatum chupandus est”

Por estos días Maradona fue sancionado por la FIFA por los exabruptos después del partido con Uruguay y al mismo tiempo leía en Moleskine literario que aparentemente Maradona es un entrenador que maneja una intertextualidad con los clásicos latinos que da miedo y deja chiquito a los oportunistas periodistas de turno. Aparentemente la famosa frase que gritó a los periodistas luego del triunfo sobre Uruguay, que clasificó con miedo a Argentina al Mundial Sudáfrica 2010, es una cita textual de Cayo Salustio Crispo. Ni más ni menos. Dice la nota -crípticamente titulada "A Maradona le tirás un libro y te lo devuelve redondo" - en Crítica Digital:

Si bien [...] Maradona mantiene un silencio piadoso alrededor del tema, parecería ser que el Diego leyó al historiador romano Cayo Salustio Crispo. La sospecha nace de la relectura de un texto de este discípulo del griego Tucídides. Se trata de Bellum Caesarium (Las Guerras del César) donde el siempre puntilloso Cayo Salustio Crispo describe los desencuentros de Julio César con el senado romano. En uno de los momentos culminantes de esta obra histórica, Gayo Salustio muestra a un Julio César exultante tras la victoria sobre Vercingetorix en las Galias. Mirando hacia el sur, el César declama: “Los del Senado, que la sigan chupando”. Cayo Salustio nada dice de la respuesta senatorial aunque es posible suponer que las palabras del César no cayeron muy bien. Obviamente, Maradona intentó hacer un paralelismo de carácter intertextual con el líder romano que los periodistas deportivos no supieron o no quisieron captar en su habitual desinterés por los textos clásicos del período latino. Lo dicho: “Continuatum chupandus est”.

Hasta acá todo bien pero aparentemente el diez va por mas, el Profe Signorini, uno de sus ayudantes también lleva la costumbre de los libros a los futbolistas de la Selección. “Es un aporte, un poco para que algunos dejen la PlayStation. Y además intento meterles una basurita en el ojo”, explica el preparador físico. A Carlos Tevez le regaló Las fuerzas morales, obra emblemática de José Ingenieros. Días después, en Ezeiza, se alegró al verlo llevar el libro con él. Porque no sólo de fútbol se habla en esas largas charlas de concentraciones. Una noche, Signorini se trenzó en una discusión sobre la existencia de Dios con Gabriel Heinze y Javier Mascherano. Fueron horas en las que el profe, como lo llaman todos, les habló de su ateísmo, las injusticias de este mundo, la hipocresía de la Iglesia. –Eso es cosa de los hombres, fueron ellos los que hicieron el daño –intentó Heinze, en defensa de Dios. No hubo caso. Signorini insistió pero se hizo tarde. A los pocos días, Heinze y Mascherano tenían algo para leer: Por qué no soy cristiano, de Bertrand Russell, que de Jesús y el Infierno escribió: “Ninguna persona que sea profundamente humana puede creer en un castigo eterno”. Imagino estas discusiones entre los muchachos y la verdad es que no me gustaría contradecir al gringo Heinze en cuestiones teologicas, a la mínima de cambio te va una patada a los dientes...

Para terminar una buena convergencia del Diez.
Maradona vs. Belgium (June 13, 1982)

Unknown Man vs. Red China (June 5, 1989)

13.11.09

River of Time

1. La semana pasada termine de leer "River of time: A Memoir of Vietnam and Cambodia" del periodista ingles Jon Swain lo cual confirma nuevamente que la literatura que mas disfruto es la No-ficcion. Este ano he leido cronicas excepcionales tales como "Imperio" de Kapuscinsky o los "Cuadernos de Sarajevo" de Goytisolo sin poder dejar de mencionar "Una luna" de Caparros ya que este ultimo me encontre ligado emocionalmente ya que Caparros describe en detalle su paso por Kapiri Mposhi, en Zambia y por Monrovia, en Liberia.

2. El libro de Swain es en cierta forma distinta porque mas alla de una detallada cronica como era la vida de la indochina en los anos 70 vista a traves de los ojos de un corresponsal de guerra es un libro que el tipo necesitaba escribir para exorcisar todos sus fantamas y tratar, al menos, de hacer las paces consigo mismo. Las experiencias que Swain describe en detalle lo convirtieron en leyenda, especialmente el haber vuelto a Phnom Penh justo horas antes de la caida en manos de los Khmer Rouge y describir en detalle el exodo de mas de un millon de personas de la ciudad hacia el campo donde luego moririan ejecutados o de hambre. El deseo de aventura en Swain pasa desde enrolarse en la Legion Extranjera o cubrir la revolucion en Eritrea donde fue capturado por los rebeldes y ser liberado despues de meses de captura hasta decidir irse a vivir a Saigon en plena guerra y decribir en detalle los crimenes cometidos por ambas facciones en Viet Nam

3. El rio Mekong es una metafora central en el libro, una poderosa barrera entre la vida y la muerte en esta parte del mundo. Swain describe el rio con amor y belleza pero al mismo tiempo cuenta como la correntada arrastraba los cuerpos de las victimas. Con la ciudad de Phnom Penh casi en manos de los Khmer Rouge, los periodistas iban al frente de batalla por la manana mientras que por la tarde tomaban aperitivos al borde la piscina, visitaban burdeles y fumaban opio. Con respecto a las fumerie transcribo un pequeno parrafo

"With opium, our inner thoughts took wings. And it turned out that for most of us the enemy was not the deadly carnage in the Cambodian fields but the tedium of life itself; especially the perceived dreariness and conformity we had left behind in the West, to whose taboos and musty restrictions we dreaded having one day to return. During the day we might have experienced terrifying incidents and made life-and-death decisions as to were to go, and how long it was wise to stay on a battlefield. But the war also provided us with a certain freedom, which is why we liked being here. We felt we had broken loose and were accomplices in an escape from the straitjacket of ease and staid habits.

Lying down and smoking, eyes closed, we were scarcely aware of the outside, even when, through the open window, an occasional flash and boom of artillery reminded us of the battles raging in the countryside. Later on, when the American B52 carpet-bombing came closer to Phnom Penh, we would feel a sullen rolling vibration as though we were on the periphery of a great earthquake. The whole house quivered. Yet, thanks to the soothing balm of the opium, I recall a strange, almost childlike, satisfaction, a feeling of absolute content in the mysterious certainty that we were utterly secure where we lay. Then at some stage, at two or so in the morning, our thoughts drifted away and we sank into an ocean of forgetfulness. Time did not exist in the limbo of the fumerie."

4. Ahora que Swain tiene una honorifica carrera de periodista se encuentra todavia a si mismo intoxicado de Indochina, el lugar que ama pero a la vez un lugar extremadamente cruel y tragico en el que todavia el rio Mekong agita sus turbulentas aguas.

1.11.09

Dimanche

Hoy pase la tarde en el Pompidou frente a las mas grandes obras del arte moderno y una vez mas tuve que enfrentarme a mis propios prejuicios. Sin lugar a dudas el mejor momento del día fue el encontrarme cara a cara con la Fountain firmada por "R. Mutt" con la que Marcel Duchamp se transformo en uno de los mayores iconos del arte moderno y me acorde lo que escribí hace unos anos cuando trabajaba en los campos de refugiados del norte de Uganda.






...."La historia del arte es lo que queda de una época en un museo. Pero en el fondo no es obligatoriamente lo mejor que había en esa época y en el fondo se trata sólo de la expresión de mediocridad "....
Probablemente ningún artista ha influido tanto en el arte de nuestros días tanto como Marcel Duchamp. De hecho, el señor es un mito dentro de los territorios del arte y la Fuente un sencillo urinal de porcelana es como la pieza clave de toda la transformación del arte del siglo XX.La obra fue expuesta por primera vez en el Salón de Artistas Independientes de 1917 en Nueva York. La exhibición neoyorkina pretendía ser una muestra de arte que mostrara lo más novedoso y vanguardista de principios de siglo XX. Sólo una condición era necesaria para participar en la mentada exhibición, pagar $ 6.00 Dlls.. Duchamp los pagaría y entró en la exhibición bajo un pseudónimo.
La pregunta que probablemente nos estemos haciendo es ¿cómo se salió con la suya?Ahora, sí consideramos una de las premisas fundamentales del arte que dice nada es por accidente, con Duchamp es más que cierta. Entonces nos enfrentamos ante un tipo de obra totalmente diferente, un objeto que va mucho más allá de la destrucción propuesta por los dadaístas.La obra no puede ser evaluada desde sus cualidades de forma, tampoco podemos evaluarla desde el punto de vista de la técnica, ya que Duchamp ni siquiera supervisó su construcción, ni escogió el color, ni el modelo, nada de nada, sólo llama a la tienda y pide un mingitorio.La cuestión va por otro lado. El espectador normal, incluyendo también al espectador siglo XXI con su mirada posmoderna y abierta del mundo globalizado, que igual ve al Gran hermano emocionado, llora cuando cazadores despiadados matan focas en el ártico en el Animal Planet o que considera a Canal A como el canal cultural por excelencia, éste también encuentra en la obra trasgresiones a sus convencionalismos tradicionales y casi lo podemos oír gritando un sonoro ¿What?
La pieza así expuesta representa todo un desafío, por lo que el punctum de la obra está en la actitud de Duchamp, no en la forma, de hecho no se necesita el mentado urinal para hablar de la obra, uno puede fácilmente imaginarlo o visitar el baño de hombres más cercano. Obviamente, la obra no es visualmente atractiva pero sí es intelectualmente artística y provocadora.
La obra es una provocación continua desde la primera vez que fue expuesta en 1917 por escasos dos días y la provocación ha trascendido hasta nuestros días. Irrita sobremanera a la tradición cristiano - humanista que siempre ha querido encasillar lo que es arte. Con esta obra se plantean preguntas importantes en la producción del arte: ¿Quién realmente tiene el criterio para determinar lo que es arte? y ¿cómo se determina lo que es arte?.



Lo que están viendo no es mas ni menos que mi contribución al arte moderno, no lo evalué desde el punto de vista técnico, solamente lo que yo hice fue concurrir a mi lugar de trabajo y preguntar que es ese armatoste blanco parado al lado de la consulta a lo me respondieron, "la ambulancia , por supuesto" a lo cual agregaron, eso sí, debe venir el familiar con la bicicleta porque este centro de salud no tiene movilidad propia.

Después de pensar un largo rato en Duchamp, la bicicleta que tienen que traer los familiares, la ambulancia y como transformar el arte moderno del siglo XXI se me ocurrió compartir con ustedes lo novedoso, vanguardista, intelectualmente artístico y provocador que puede ser trabajar de médico en áfrica.

29.10.09

Argentina: doscientos años de soledad

Por Tomas Eloy Martinez, El Pais 29-10-09



Historia no es sólo aquello que se cuenta del pasado; es también, y a veces sobre todo, el relato de lo que se omite, de lo que queda en los márgenes. En mayo de 1910 Argentina celebró el primer centenario de su emancipación de la Corona española. Pocos meses después, el adolescente Juan Domingo Perón fue llevado por su abuela paterna al Colegio Militar de la ciudad de San Martín, donde estudió amparado por una beca de misericordia. Venía de un hogar inestable, errante, y en el colegio descubrió el único modelo de familia que conoció en la vida. Se dijo que si aquello era bueno para él, también debía ser bueno para el país.

Con esa escena empieza el siglo XX en Argentina. Tres décadas más tarde, cuando alcanzó el poder, Perón puso en práctica las lecciones de disciplina y orden que había aprendido en la milicia. Organizó el país en torno a la figura de un líder fuerte, carismático, cuya palabra era ley. Si bien esos dictámenes dependían de la aprobación de instituciones formales, como las dos cámaras del Parlamento y las cortes de justicia, las instituciones respondían por lo general a los designios del líder. A ese modelo jerárquico y autoritario pueden atribuirse las alternancias civiles y militares que se sucedieron a partir de 1955 y que cerraron el camino a todos los proyectos de desarrollo. Desde entonces Argentina se convirtió en un campo de batalla entre facciones que se disputaban fragmentos de poder y que obedecían, todas ellas, a diferentes caudillos únicos intolerantes con las ideas de los otros. Cada uno de esos caudillos, a su turno, fue debilitando las instituciones, estimulando formas de corrupción cada vez más sofisticadas y más sometidas a la voluntad de quien estuviera al mando.

El peronismo domina la política argentina aun desde antes de que Perón regresara de su exilio en Madrid en 1973. Con el paréntesis de las dictaduras militares -que trataron, en vano, de aniquilarlo- se ha mantenido en el poder de una manera u otra hasta hoy y es posible que siga prevaleciendo durante otras dos o tres generaciones. Nadie, sin embargo, sabe con certeza qué es el peronismo. Y porque nadie sabe qué es, el peronismo expresa el país a la perfección. Cuando un peronismo cae, por corrupción, por fracaso o por mero desgaste, otro peronismo se levanta y dice: "Aquello era una impostura. Este que llega ahora es el peronismo verdadero". La esperanza del peronismo verdadero que vendrá está viva en Argentina desde hace décadas, como si se tratara de un imposible Mesías que iluminará el fin de los tiempos, cuando el país recuperará la grandeza de una vez para siempre.

Argentina, así, se ha ido tornando impredecible, un enigma ante el que se estrellan todas las respuestas. ¿Cómo imaginar el futuro inmediato, la celebración del segundo centenario de la independencia entre las brumas de un país a la deriva? Las instituciones siguen inestables. A diferencia de lo que sucede en Chile y Brasil, cuando un gobierno sustituye a otro, los técnicos y los cuadros medios del gobierno que se va son desalojados y reemplazados por funcionarios promovidos menos por sus méritos que por afinidad de intereses con el caudillo de turno. Así se derriban proyectos elaborados durante años, se ponen a prueba otros y las buenas experiencias acumuladas se derrochan. El seleccionado argentino de fútbol es una eficaz metáfora del país. Algunos de sus jugadores se cuentan entre los mejores del mundo y los clubes europeos pagan fortunas para tenerlos en sus planteles. En Europa deslumbran pero en Argentina fracasan. Se pasean desorientados por los campos de juego, después de que demasiados entrenadores les han dado directivas opuestas. La grandeza está en la imaginación de todos. Nadie parece resignarse a los límites de la realidad.

También el periodismo pierde la calma. Si el gobierno se crispa, si los humores se enardecen, el periodismo lo imita: se divide en facciones efervescentes, sordas a las razones de los bandos opuestos. El periodismo debería releerse a sí mismo. Muchos de los intereses y principios que defiende y predica hoy son inversos a los que defendía ayer.

A partir de lo que aparece ahora en la superficie de los hechos se vislumbra la silueta de un futuro más bien opaco, que en nada se asemeja al del primer centenario. En 1910 el gran Rubén Darío escribió un largo "Canto a la Argentina" impregnado de una imbatible fe en el futuro. "¡He aquí la región del Dorado, he aquí el paraíso terrestre,/ he aquí la ventura esperada!" La voz del gran Juan Gelman se oscurecía en 2004 al entonar su propio canto a la Argentina: "Cuando el dolor se parece a un país / se parece a mi país. Los/ sin nada envuelven con/un pájaro humilde que/ no tiene método".

En toda la despoblada extensión de Argentina se oyen tambores de guerra. La batalla por conservar el poder o por arrebatarlo es a vida o muerte. Sindicatos adictos al gobierno contra sindicatos adversarios; piquetes contra piquetes. Las calles de las grandes ciudades han entrado en ebullición. La justicia se mueve a paso lento, tratando de proteger las instituciones. Gracias a la justicia, el mejor legado del gobierno Kirchner no se ha perdido en el polvo de las reyertas. Los imperdonables crímenes de la dictadura, los robos de recién nacidos en cautiverio, las torturas despiadadas, los vuelos con prisioneros a los que se arrojaba vivos en el océano y en el río de la Plata, no van a quedar ya sin condena y sin memoria.

Que se haya recuperado la dignidad vuelve aún menos explicable que la educación agonice degradada en sótanos de negligencia que medio siglo atrás parecían imposibles. La influencia de la Iglesia, que ha sido siempre un poderoso factor de regresión e intolerancia, no cesa de crecer. La prédica de los últimos tiempos trata de llamar la atención sobre el escándalo de la pobreza, pero no recuerda que por la pobreza mueren cientos de madres adolescentes en abortos clandestinos y que la mortalidad infantil supera el trece por mil.

Todos los diagnósticos sobre Argentina del futuro inmediato son pesimistas, porque el país pone sus esperanzas muy en alto, evoca las grandezas del pasado y sigue creyendo en una superioridad que las dictaduras militares convirtieron en polvo.

Vale la pena entonces, volver los ojos y preguntarse dónde está ahora Argentina. ¿En qué confín del mundo, centro del atlas, techo del universo? ¿Argentina es una potencia o una impotencia, un destino o un desatino, el cuello del tercer mundo o el rabo del primero?
Siempre se creyó que Argentina estaba en un sitio distinto del que le habían adjudicado la geografía, el azar o la historia. Pero nunca hubo tanto divorcio entre la realidad y los deseos como en estos últimos seis años. Ya en 1810 una de las obsesiones argentinas era alcanzar la grandeza. Lo que ahora obsesiona al país es el miedo a la pequeñez. Para evitar ese derrumbe, se oye repetir una y otra vez: Somos grandes, estamos entre los grandes. La única lástima es que los grandes no se dan cuenta.

"Estamos llamados a iniciar una nueva era", escribía Juan Bautista Alberdi en 1838. Y después Sarmiento, Mitre, Martí, Roca, Darío: todos se sumaron al coro, todos esperaban que la grandeza se manifestara de un momento a otro. ¿Dónde estábamos entonces, en qué lugar? Éramos un inagotable cuerno de la abundancia: los ganados y las mieses se derramaban por los costados.
Hacia 1928, las estadísticas señalaban que Argentina era superior a Francia en número de automóviles y a Japón en líneas de teléfonos. A fines de 1924, el poeta nacional Leopoldo Lugones proclamó que los militares eran los "últimos aristócratas" del espíritu y les exigió que, espada en mano, ejercieran su "derecho de mejores", con la ley o sin ella y emprendieran cruzadas para imponer un "orden nuevo". Las sucesivas cruzadas de los "aristócratas del espíritu" -que culminaron en la guerra de las Malvinas, en los campos de concentración de la dictadura y en los cementerios de desaparecidos-, precipitaron el país en un desastre para el que todavía busca salida.

Pertenecer a lugares a los que sólo Argentina cree pertenecer; imaginarse árbitro, mediador, factor de decisión en pleitos a los que no ha sido invitada: tales son las antiguas maldiciones de la nación, los signos alarmantes de un destino descolocado. Los países del primer mundo se distinguen, a grandes rasgos, por tener seguros de desempleo, escasa o nula mendicidad, bajísimo índice de mortalidad infantil, educación laica, gratuita y obligatoria. Y trenes. Sobre todo trenes. Los trenes (más que cualquier otro medio de transporte) son el termómetro de cuándo un país anda bien y cuándo no. Vaya a saber por qué, pero la modernidad se mide a través de vagones puntuales, frecuentes y limpios, como lo descubrieron los alemanes del este cuando cayó el Muro y pudieron viajar, deslumbrados, en la segunda clase del expreso Francfort-Hamburgo.

Mucha de la infelicidad argentina nace de una lección que la realidad siempre contradice. A los niños se les enseña en las escuelas que son hijos de un país grande acechado por desgracias de las que no es responsable. Nunca le será fácil alcanzar la dicha a un país que cree tener menos de lo que merece y que desde hace décadas imagina que es más de lo que es. "¿Cómo se vive allá, en América Latina?", me preguntaba un amigo cuando volví del exilio. Argentina no estaba, entonces, en América Latina sino en ninguna parte: ni en el continente al que pertenecía por afinidad geográfica ni en la Europa a la que creía pertenecer por razones de destino. Estaba, como quien dice, en el aire. Lo peor es que cuando tenga que bajar, no sabrá dónde.

28.10.09

Paris



Un par de semanas bastantes caóticas, pasaron muchas cosas, mecanismo trabajo, un virus se ensaño con todos mis contactos de emails y hubo algunas desiciones difíciles. Un viaje a París a ultimo momento para defender la propuesta del proyecto de tuberculosis en la Provincia de Kampong y una presentación frente un gigantesco grupo de gente en la cual básicamente me destrozaron, muchas preguntas frente a las cuales no tuvimos respuestas pero después de horas de discusiones algo de luz y la posibilidad de seguir trabajando en tuberculosis en Camboya por un tiempo mas.

Estoy parando en un pequeño hotel en la zona de la Bastille, una habitación muy pequeña en el ultimo piso, mas que habitación una pequeña buhardilla con una ventana muy pequeña desde la cual se ve la torre Eiffel.

Hemingway cuenta en "París era una fiesta" que los anos vividos en la buhardilla a unas pocas cuadras de aqui fueron los mejores anos de su vida.

Necesito volver a leer un buen libro.
Sigo herido por la literatura
Merde.

22.10.09

Zambia



Hace unos dias recibi la noticia que el programa de HIV en Zambia de MSF en el que trabaje un tiempo fue integrado en el programa nacional de hiv del ministerio de salud zambiano.

Les dejo una pequena muestra de como era un dia de trabajo en el hospital de Kapiri Mposhi, el video fue realizado por un equipo de la television griego que estuvo con nosotros unos dias.

Ah, Kapiri Mposhi...

9.10.09

Dancing Queen

1. Acabo de leer que le dieron el Nobel de la Paz a Barack Obama y una vez mas los suecos me dan por las bolas. Un nobel de la Paz a quien conduce un país que esta librando dos guerras y tiene 700.000 millones de dolares de presupuesto anual para estas. Igual me molesta mucho mas que no hayan dado el Nobel a Conrad, Borges o Tolstoi. A Obama el establishment se lo comió hace rato pero al menos los suecos tienen a ABBA.

2. Después de explicarle y ofrecerle por todos los medios posibles para que H. Y. acepte internarse y empezar el tratamiento de su tuberculosis multiresistente (al menos los próximo dos anos de su vida) el decidió poner todas las ofertas de lado y volverse a Vietnam con su familia a la cual seguramente contagiara y estos contagiaran a sus vecinos y estos a los vecinos de sus vecinos. En fin, una verdadera mierda tratar con pacientes con tuberculosis multiresistente.

3. Esta semana me llego el manuscrito final del articulo que escribimos y preparamos con algunos colegas acerca de la alta prevalencia de la infección por criptococos en los pacientes seropositivos camboyanos. Esperamos publicarlo para fin de ano en alguna revista cientifica.

4. El 28 de octubre es la fecha elegida para que le presentemos a nuestros jefes la propuesta para expandir nuestras actividades en el diagnostico y tratamiento de la tuberculosis. La idea es bastante simple, hace tiempo que trabajamos en el hospital de Kampong Cham pero no es el numero de pacientes que esperamos por lo que la idea es tener una estrategia mas activa. Hicimos un mapeo de los centros de salud de la provincia y las comparamos con las zonas mas pobres y determinamos que lo ideal es tratar de armar clínicas moviles y también alguna lancha sanitaria que suban y bajen a lo largo del Mekong. Ojala que salga ya que navegar por el Mekong con el estetoscopio bajo el brazo puede llegar a ser una experiencia fabulosa.

5. Ayer hable con dos queridos amigos que están muy lejos, nos pusimos al día y me dieron muchas ganas de verlos. Una pregunta habitual que me hago a mi mismo siempre es que va a pasar cuando vuelva y la respuesta es que todos siguen mas o menos con sus vidas y yo al llegar voy a continuar con la mía aunque no desde el punto en que la dejé, porque las circunstancias que estaban ya no estarán. Seguramente sabré más de la amistad y más de la soledad y varias maneras de valerme por mí mismo. Seguramente habré cambiado y no sabré cuánto hasta que esté de regreso en el lugar de donde partí.

8.10.09

Jueves

Con la mudanza a Camboya no tuve otra que olvidarme de la selección de fútbol de mi país, especialmente del Diegote, y creo que involuntariamente he dado un pequeño paso hacia la felicidad.

Debido a las circunstancias mencionadas, he dejado de seguir los complots y las intrigas de la blanca y celeste para pasar a jugar y disfrutar del fútbol con los camboyanos, lejos de las eliminatorias y los chimentos, lo mejor de la semana para ellos fue cuantos goles iban a recibir en el amistoso que jugaron con Singapur. Cuando uno juega al fútbol con los camboyanos casi nunca pasa nada, nunca nadie va a tener un gesto o un exceso verbal con un companero o un rival y el momento de mas acción es cuando todos corremos detrás de la pelota con la fabulosa idea de armar una jugada inolvidable que nunca va a llegar. Lo mejor de todo es cuando llega la tormenta de la tarde y el fulbito se juega bajo una agradable lluvia tropical.

Los monzones tropicales continúan acechando con nuevas e interminables lluvias: el calor, el fútbol con los camboyanos los sábados por la tarde. Mientras tanto, disfrute como nunca anoche cuando en la tele en el noticiero camboyano el momento "wining" fue un terrible gol de Palermo de cabeza desde casi 40 metros.

Nostalgia que le dicen.

3.10.09

Les gens de la riziere

UNO.
Los monzones han llegado con fuerza a esta parte del mundo, los terremotos hacen estragos en la isla de Sumatra y otra vez un Tsunami nos ensena geografía con nombres de islas que ni siquiera sabíamos que existían. En Phonm Penh desde mas de una semana que llueve y especialmente ayer por la noche media ciudad termino bajo agua. El paso de tifón Ketsana ha dejado casi medio Vietnam bajo agua y varias decenas de muertos mientras que en Camboya fueron miles y miles las hectáreas de arroz que fueron destruidas en el oeste del país lo cual seguramente desestabilizara la economía pero sobretodo pondrá a miles en riesgo de hambruna en los próximos meses.


DOS.
Tratar de describir lo que representa el arroz en la vida de los camboyanos es una tarea complicada. Es parte de su historia con los campos de arroz en los murales de los templos de Angkor, es un icono, es la base de la dieta pero mas que nada es un estilo de vida. Ningún camboyano imagina su desayuno, su almuerzo o su cena sin arroz. Cuando ceno con algunos amigo camboyanos siempre el plato principal es el arroz y el resto solo consiste con que se acompaña el arroz.


TRES
En las historias clínicas del hospital los médicos con los que trabajo lo primero que preguntan y reseñan es si el enfermo come o no come arroz. Cuando el paciente, o mejor aun los familiares del paciente manifiestan que el enfermo desde hace unos días que no come arroz es recién en ese momento cuando el medico frunce el seno y se rasca la cabeza

28.9.09

Heavy cross

Generalmente esta es la hora del día en que me quedo solo en la oficina, se acabaron las reuniones, los pacientes y el café. Es la hora en que generalmente leo algunos blogs, respondo algunos emails pero sobretodo pienso. Pienso en todo lo que me quedo pendiente para mañana y que seguramente me quedara pendiente para la próxima semana, pienso en todas las cosas que quiero escribir en esta bitácora, pienso que sera del resto de mi semana, del resto del mes y pero mas pienso que sera del resto de mi vida y todo eso es lo que mas o menos pienso cuando me quedo solo en la oficina.

Aquí, reportando con la música bien alta, el ultimo hombre en una oficina

24.9.09

Jueves

Cae la tarde en Phnom Penh

Acabo de llegar del laburo, E. esta leyendo mientras que yo me abro una cerveza y prendo la tele, Obama esta en la pantalla de la BBC presidiendo la sesión del consejo de seguridad hablando de que todos debemos escribir un nuevo capitulo de paz y seguridad en la historia de la humanidad.

Creo que tratan de decirnos que hay algo puro, después de todo.

Hablan de las armas nucleares. Hace tiempo que se acabo la guerra fría pero ahora pasan por occidentales y orientales, judíos y musulmanes, choque de civilizaciones. Todos hablan de las armas, de los medios y justamente todos los que están sentados en esa mesa son los principales productores de armas. No hay por supuesto, una critica al poder establecido, al orden del dinero global y no nos dan ninguna pista del mundo del mundo que vendrá, salvo que será un mundo con menos emisiones de carbono.

16.9.09

Algunas notas a las 6:15 de la tarde


1.Hoy leí una declaración interesante del Primer Ministro Camboyano en referencia al próximo vencimiento de una de las cuotas de la deuda externa camboyana con acreedores norteamericanos, lisa y llanamente sugirió que los Estados Unidos deberían exceptuar a Camboya de su deuda externa teniendo en cuenta los 110.000 toneladas de bombas que los americanos lanzaron sobre el oeste de camboya en los anos 60 y 70 tratando de aniquilar células del vietcong y camboyanos comunistas.


2. Rápido de reflejos, el Embajador americano respondió que los países deben ser responsables con los compromisos adquiridos previamente, lamentablemente los periodistas estuvieron bastante lentos y no le hicieron notar al embajador que las leyes de derecho internacional también dicen que no se tiran bombas así porque si, especialmente si sobre el país sobre el cual se esta bombardeando no hay una declaración formal de guerra.


3. Espíritus ancestrales vagan estos días por Camboya en busca de comida: en esto consiste Pchum Ben, la festividad en la que los camboyanos festejan por estos días alimentando las almas de los antepasados que llevaron una mala vida para aliviar su sufrimiento. Durante las próxima dos semanas, los creyentes acuden a las pagodas a las cuatro de la madrugada todos los días para llevar sustento a las ánimas de sus familiares muertos.

"Pchum Ben es un reflejo del sincretismo religioso que se practica en Camboya donde el animismo se mezcla con el brahmanismo, la religión del antiguo imperio de Angkor, y el budismo", explica a Efe Miech Ponn, consejero de la comisión de costumbres del Instituto Budista de Phnom Penh. Aunque el budismo prevé la reencarnación de los muertos, los camboyanos han creado una mitología propia a partir de su rica y variada herencia según la cual los espíritus de aquellos que cometieron malos actos en vida quedan atrapados en el mundo terrenal por el mal karma.


Durante Pchum Ben, Yama, el Rey del Infierno libera las almas para que busquen a sus familiares y reciban comida: si lo consiguen, podrán optar a reencarnarse; en caso contrario, los familiares deberán temer las consecuencias.

El arraigo de esta tradición en la sociedad camboyana es tan fuerte que ni siquiera el khmer Rouge, que abolió las iglesias durante su reinado de terror maoísta, se atrevió a erradicarla del todo. La celebración terminará el 19 de septiembre, el día en que las familias se reúnen en sus aldeas natales. "Es el momento del año en el que se reencuentran familiares que viven muy lejos. Deben estar todos juntos para hacer la ofrenda a los ancestros", explica Miech.
La última jornada es la más importante y requiere que todo el mundo se concentre en las pagodas, donde los monjes se pasan la noche en vigilia cantando.

10.9.09

El gordismo


El Gordismo es una forma de vida. Surge del fanatismo por Diego Maradona y se afianza y crece a medida que el protagonista central tiene vicisitudes que lo mantienen entre la vida y la muerte. El Gordismo no es una religión, pero es un fanatismo. Aunque anida en su centro un descreimiento cabal: el protagonista es un sujeto maravilloso pero no trascendental. Cualquier gordista lo sabe: Maradona no hace milagros y aunque se lo apoda “Dios” se sospecha que es un simple mortal con una calidad extraordinaria para jugar al fóbal y una mente endiablada, casi de un publicista, para largar frases y slóganes: “Más falso que un dólar celeste”, “Se le escapó la tortuga”, “Billetera mata galán”, “La pelota no se mancha”, “Mascherano y diez más”, “Mascherano, Jonás Gutiérrez y nueve más”, etc. El Gordismo practica un sincretismo desaforado: es peronista, guevarista, menemista, capitalista, anticlerical, religioso, medium, esotérico, cavalista y todo lo que se ponga por delante. Los pobres practican el Gordismo cuando la única utopía que les queda es poder dar una vuelta olímpica. Y las clases medias practican el Gordismo cuando lo único que les importa —caiga quién caiga— es que no les toquen el culo, el cable y sus ahorros. El Gordismo, de esta manera, es conservador. También es nacionalista, ya que postula una superación del ser nacional. Los gordistas son de derecha y humanos. El Gordismo improvisa, nunca planifica, busca más el efecto que el corazón de las cosas. Kirchner es gordista cuando prefiere fútbol free que hambre cero. El Gordismo tiene vocación de poder, nunca vocación de servicio. En esto, es igual a casi toda la camada política que viene repartiéndose el poder en nuestro país. El Gordismo es adicto a las cámaras, a los micrófonos. Lo que no sucede en la realidad virtual, no tiene peso ni merece ser vivido. El Gordismo es esclavo de la representación. Nunca le habla a uno solo y en privado. Siempre que habla, aunque se dirija a una persona en cuestión, necesita que lo escuche el coro griego de fondo. El Gordismo viene reinando en el país desde hace más de 30 años y recién la aparición de Lionel Messi le hizo imaginar un futuro sin gordismo o negociado con el Messismo. Pero Messi a diferencia de Maradona, tiene un problema clave dificil de digerir para los miles de carapintadas con Legacy. No es argentino. De hecho, es gracias a la Madre Patria y los Euros del Barcelona que el joven nacido en Rosario puede jugar en las grandes ligas. Es gracias al Barsa que Messi y su familia tiene un futuro por delante. Fue en los laboratorios del Barsa donde lo alargaron, lo cuidaron con algodones y le dieron una identidad. Fue en el césped ultracheto y sofisticado del Barcelona donde se lo rodeó de un equipo de jugadores notables que juegan para Messi pero que, también, saben que Messi juega para ellos. Nunca, nunca, hemos visto a un niño tan bajo saltar tan alto y poder meter ese cabezazo mortal y esquinado que enloqueció al arquero del Manchester United. ¿Qué es lo que hizo levitar a Messi de esa manera sobrenatural?, se pregunta el Gordismo. Respuesta: el amor, la gratitud. Porque Messi, acá, en este bendito país de ganadores, hubiera terminado jugando en el fútbol cinco con suerte o como uno de los Grosos de Tinelli. Porque siempre, si a uno le va mal, está la carcajada de Tinelli para atemperar las penas. No hay rescoldo de la noche del país donde junto al brillo de los televisores y el calor de las estufas no se filtre también la carcajada de Tinelli. El Tinelismo y el Gordismo pueden ser amigos o enemigos, pero están construídos con el mismo barro. Los que entren ahí, que abandonen toda esperanza.

4.9.09

Salud sexual y reproductiva

Hace unos dias plantee el hecho que la nueva legislacion vigente en la Argentina con respecto al consumo personal de drogas me parece de caracter progresista y que respeta las libertades individuales. Dentro del mismo post mencione imprudentemente el deseo de que se debata el aborto legal, digo imprudentemente porque tendria que haber expresado el deseo que se debata una ley de salud reproductiva acorde a los tiempos que corren, que respete las libertades y desiciones personales pero por sobre todas las cosas que se debata con estadisticas reales y como un verdadero problema de salud publica y no con la moralidad que algunas intituciones viciadas de poder quieren imponer.

Nadie mas o menos inteligente puede estar a favor del aborto en si mismo, la gran mayoria de los que piensan "distinto" solo estan a favor de la libertad de eleccion de la mujer, no creo que exista estar a favor o en contra, eso solo son ciertos modismos de clase media y en lo que todos deberiamos estar a favor, y esto es un opinion personal, es de hacer de la salud sexual y reproductiva una política de Estado, seria y en serio, y del aborto controlado y legal una alternativa, aun cuando sea la más terrible.

Mi propia experiencia en los ultimos anos me llevo a cambiar mis ideas de una manera muy drastica, no se si vale la pena entrar en detalles legales o tal vez medicos, donde tambien la moral impone sus criterios, entiendo que hay una discusion legal y moral importante pero tambien creo firmemente que reina la hipocresia (especialmente en america latina, donde de cada tres nacimientos hay un aborto inseguro) y tambien creo que alguna vez tenemos que dejar de creer en el principio de autoridad (moral especialmente) y sacar nuestras propias conclusiones.

Ver mujeres somalies violadas por etiopies, mujeres congolesas violadas por una patrulla rebelde entera, mujeres que pedian el aborto porque sus otros cinco hijos no tenian que comer y estaban ya desnutridos me demostro que un hijo es producto del amor y al mismo tiempo me demostro siempre que, a pesar de las condiciones extremas en las que se este la desicion de abortar siempre es terrible y algunas mujeres nunca vuelven o se recuperan de esa desicion. Tambien aprendi que las mujeres que no abortan es porque pueden elegir no hacerlo, ya que tienen recursos, informacion, apoyo, medios y eso es mucho mas de lo que tienen la mayoria de las que decide abortar.

Les dejo informacion para que saquen sus propias conclusiones y no dejen que el poder de turno les marque la agenda... dejo las referencias por si alguien quiere mas informacion.

1.Los numeros.
Segun los datos de la Organizacion Mundial de la Salud cada ano en el mundo se producen apoximadamente 210 millones de embarazos, de este total mas de 50 millones de embarazos terminan en abortos inducidos. Se calcula que aproximadamente la mitad de estos abortos inducidos (25 millones) son realizados en condiciones extremas e inseguras. Aproximadamente el 95% de estos abortos inducidos en condiciones extremas se realizan en paises subdesarrollados.
Globalmente se estima que se realizan mas 55.000 abortos por dia y que hay un ratio de un aborto inseguro por cada siete nacimientos, pero hay algunas regiones del mundo, como America latina donde la relacion es un aborto inseguro por cada tres nacimientos.
En algunos paises las complicaciones producto de un aborto inseguro representan la principal causa de muerte materna, pero tambien es la causa de mas facil prevencion y tratamiento. En la Argentina las complicaciones del aborto inseguro representan 24,7% del total de las muertes maternas segun el Ministerio de salud en un informe publicado la semana pasada.

2.Discapacidades y problemas de salud.
Entre un 10% y un 50% de las mujeres que se realizan un aborto inseguro necesitaran cuidados medicos por presentar complicaciones donde se destacan los abortos incompletos, infecciones, hemorragias y danos de organos internos tales como la perforacion o el desgarramiento del utero. Tambien hay que mencionar los problemas a largo plazo tales como dolor cronico, enfermedad inflamatoria pelvica e infertilidad. El 70% de las mujeres africanas tratadas por complicaciones de un aborto inseguro tiene menos de 20 anos. La usuaria promedio de un aborto inseguro son mujeres jovenes, solteras, con falta de acceso a metodos anticonceptivos, informacion y servicios medicos . Se caracterizan por falta de contactos sociales y economicos para buscar una forma mas segura de abortar. Estas mujeres tambien se caracterizan por demorar la terminacion del embarazo cuando el riesgo de complicaciones es mayor. Los metodos y procedimientos utilizados en los abortos inseguros son numerosos y extremadamente peligrosos y no vale la pena detallarlos porque todos mas o menos los conocemos.

3.Los costos costos para los sistemas de salud.
El tratamiento de las complicaciones de un aborto generalmente requieren cirugias, dias de hospitalizacion asi como transfusiones sanguineas, antibioticos y analgesicos. La OMS documento que en numerosos hospitales de paises subdesarrollados tratar las complicaciones de los abortos consume tanto como el 50% del presupuesto.

4.Legislacion and Politicas de salud reproductivas
La terminacion del embarazo esta permitida en mas de 131 paises (y en practicamente todos los paises desarrollados) tanto por razones sociales, economicas o por razones de salud o incluso personales. La gran mayoria de los paises del mundo han reconocido el aborto inseguro como un verdadero problema de salud publica en el ano 1994 en la Conferencia Internacional sobre poblaciones y desarrollo y han hecho un llamado humanitario por servicios medicos calificados pra prevenir el aborto inseguro y sus complicaciones. Los paises participantes tambien promovieron el aborto seguro en aquellos paises en los que esta permitido.

5.Por que se aborta?
La gran mayoria de las mujeres que deciden terminar con su embarazo estan casadas o conviven con sus parejas y ya tienen hijos. Entre las razones por las cuales se termina en un embarazo no deseado se deben mencionar

1. Falta de acceso a metodos anticonceptivos: al menos 350 millones de parejas no tienen acceso a informacion sobre salud reproductiva y a metodos anticonceptivos en si mismos.
2. Falla en el Metodo anticonceptivo: entre 8 y 30 millones de embarazos cada ano son resultado de una falla en el metodo anticonceptivo- uso inconsistente o incorrecto o falla del metodo en si mismo
3. Violencia sexual o violacion: estudios recientes sugieren que una entre cinco mujeres va a experimentar una violacion o un evento de violencia sexual durante su vida
4. Espectro de razones sociales y economicas: mujeres solteras, adolescentes, abandonas por sus parejas, parejas inestables, demasiados hijos para mantener o pobreza.

6.Que se puede hacer?

-Asegurar acceso universal a servicios de planeamineto familiar, especialmente en mujeres jovenes y mujeres en riesgo de sufrir abuso sexual, violacion o violencia.
-Ofrecer la posibilidad de terminar el embarazo con personal sanitario calificado, comprometido en aquellos lugares donde lo permita la ley.
-Asegurar que haya servicios de alta calidad para el tratamiento y el manejo de las las posibles complicaciones y que estos sean accesibles a traves de los sistemas de salud.
-Ofrecer informacion sobre salud reproductiva a todas las mujeres que hayan decidido terminar con su embarazo
-Educacion sexual en las en todos los niveles (escuelas, comunidades, medios de comunicacion)
-Discutir leyes y politicas de salud que promuevan la salud reproductiva y permitan el libre acceso a servicios de planeamiento familiar, de salud donde se puede desarrollar la interrupcion del embarazo si la ocasion o la mujer lo requiera.

28.8.09

Viernes


1.
Estuve trabajando en el Hospital de Kampong Cham toda la semana y disfrute muchisimo el viaje hasta alli, desde hace unos dias empezamos la temporada de lluvias y los campos de arroz lucen esplendidos.
2.
Esta semana la Corte Suprema de Justicia Argentina despenalizo el consumo de marihuana para uso personal, una medida que considero progresista y que en cierta medida me parece extremadamente razonable y muy satisfactoria. Se podran leer y escribir miles de pro y contra de esta resolucion pero hoy, un fabuloso viernes por la tarde no voy a caer en lugares comunes ni hacer ningun tipo de apologia de nada.
3.
Todos somos esclavos de algo y cada uno le puede poner el nombre que quiera, puede ser un porro, tu novia, tu ansiolitico de cada noche, los libros, la estupidez, alcohol, la television o la internet. No hay que tener mucha nocion de antropologia para darse cuenta que la busqueda de estados mentales alterados y formas de escapismo comienza casi con la humanidad misma.
4.
Espero que este tipo de debate sirva para abrir caminos a otros mucho mas necesarios como el del aborto, pero lamentablemente estoy seguro que esto seguira siendo solo una expresion de deseo.
5.
Y por ultimo, Borges

De estas calles que ahondan el poniente,
una habrá (no sé cuál) que he recorrido
ya por última vez, indiferente
y sin adivinarlo, sometido
a quien prefija omnipotentes normas
y una secreta y rígida medida
a las sombras, los sueños y las formas
que destejen y tejen esta vida.

Borges – Límites

25.8.09

Martes


1.
En 1979, al momento de caer el Régimen de los Khmer Rouge , de los mas de 500 médicos que se encontraban a comienzos de 1975, solo alrededor de 20 permanecieron, el resto escapo o fue ejecutado por el régimen. En ese mismo ano se reabrió la Facultad de medicina y 728 alumnos retornaron o iniciaron sus clases. La Facultad de Medicina, como todas las otras universidades no contaba con Instructores o profesores camboyanos ya que todos habían sido fusilados por el régimen, dependía de los profesores, consejeros y material vietnamitas. Según el material que uno lee, tomo anos enseñar a una nueva generación de camboyanos las ventajas de una medicina moderna en contraposición de los a los métodos tradicionales de curación Khmer que habían sido impuestos por los Khmer Rouge. Después de una dura batalla, los estudiantes aceptaron la importancia de la medicina preventiva y la salud publica. Para ver un ejemplo de como costo recuperar todo el sistema sanitario podemos poner de ejemplo al Hospital de Kampong Spoe, que a finales de 1979 contaba tres enfermeras solamente. En 1985 el hospital contaba con un staff de 33 personas, incluyendo un medico vietnamita un equipo formado por dos médicos y tres enfermeras húngaras. El hospital en el cual trabajo, The Soviet-Khmer Friendship Hospital, reabrió sus puertas a mediados de 1982 con un pabellón de 60 camas. A mediados de 1985 Phnom Penh ya contaba con 6 hospitales medianamente equipados y 19 dispensarios.

2.
Hoy en día un medico camboyano trabajando en un hospital publico tiene un recibo de sueldo de mas o menos 140 dólares y quizás el problema mas grande de todos es como motivar gente capaz para que se comprometa con su trabajo, que estudie, que se capacite cuando lo único que quieren es marcar cumplir su horario para irse a su consulta privada donde ganan 10 veces mas. Es extremadamente difícil poder ver algún tipo de motivación que no sea la económica, las ganas de reconstruir un país, de cuidar a los que menos tienen no sirve para llegar a fin de mes ni para darle de comer a tus hijos.

3.
¿El estimulo moral verdaderamente existe?
¿Existe algún otro tipo de estimulo eficaz que no sea el económico?

20.8.09

Revolutionary road

1.
Si usted es uno de los asiduos foristas de cualquiera de los principales diarios en la Argentina, si usted es uno de los repiten el rap de odio de los periodistas de turno, si usted no tolera a los que creen que hay otro camino o si usted no ve mas alla de las ideologias o las pasiones, en fin, si usted es un liberal o un pequeno facho por favor no lea el siguiente post, seguramente no se sentira comodo.

2.
Hace unos dias con E. terminamos de ver la pelicula "Che" de Soderbergh . Hace un tiempo que habiamos visto la magistral primera parte de la pelicula donde se retrata la guerra de guerrillas en la Sierra Maestra, sin más efectos que la condición humana ante las balas y guiada por una voluntad inquebrantable y honesta de cambio. No hay mayor dramatismo, creo que no hay mucho histrionismo. Hay guerrileros, algunos mas simpaticos que otros y tambien esta Fidel y Camilo Cienfuegos. Siempre busque en la pantalla a Benicio del Toro pero nunca lo encontre ya que siempre vi a Ernesto Guevara. Increible que nos cuenten la historia de una revolucion a traves de un monosilabo con hache en el medio: Che!


3.
¿Cómo se hace una revolución? La respuesta está en la pantalla.
¿Nostalgia? Tristemente, sí. Al menos un poquito no?
Casi 50 anos despues todo salio como el orto y es tiempo que los cubanos asuman el fracaso o mejor aun asumamos el fracaso todos ya que tanto ellos como nosostros vivimos enganados. Hoy no nos dominan con dictadores baratos sino a traves del entretenimiento y tal vez al asumir el fracaso recordemos una leccion simple en la propia boca del Che: un pueblo que no sabe leer y escribir es fácil de engañar. Hoy, los mismos que alguna vez mandaron a los opresores al paredon serian los primeros en la fila para fusilar.

13.8.09

Las reinas de Saba


La escritora colombiana Laura Restrepo ha viajado a los campos de refugiados en Yemen. Miles de mujeres y niños llegan hasta allí desde las costas del Cuerno de África. Huyen de la guerra, el hambre y el odio. Tercera entrega de la serie "Testigos del horror" con la que Médicos Sin Fronteras y "El País" quieren rescatar del olvido a las víctimas de la violencia.


Vienen subiendo, y son miles. Mujeres con sus hijos. Saben que muchas morirán por el camino, o que tendrán que dejar enterrados a sus hijos. Pero la decisión está tomada, y no pararán hasta encontrar un lugar donde la vida les abra por fin la puerta. Cueste lo que cueste, y por encima de quien se interponga. Si te paras aquí, en la costa sur de Yemen, vas a verlas venir: el Cuerno de África entero parece estar subiendo. En pateras, por el desierto a pie, mendigando a través de las antiguas ciudades. Me dice Habiba -somalí, comadrona graduada y querida amiga mía- que cuando escucha la palabra refugiados no piensa en hombres. Cierra los ojos y ve mujeres con niños.
-

Habiba -le pregunto-, ¿no serás tú la reina de Saba?


¡¿What?!

Cuando Médicos Sin Fronteras me propone visitar los campos de refugiados africanos en la República árabe de Yemen, lo primero que hago es releer un texto de 1934 en el que André Malraux cuenta cómo abordó un pequeño avión para sobrevolar esa región en busca de una mujer de 3.000 años de edad. Se trataba de la legendaria reina de Saba, soberana del incienso y de la mirra, nacida en algún punto incierto entre Yemen, Etiopía y Somalia. Poco después de su expedición, Malraux le anunciaba al mundo que había avistado desde el aire los vestigios del mítico imperio de Saba. Y sin embargo, a ella, a la Reina, nunca la encontró.

Nos acercarnos en jeep a Adén, en el extremo sur de Yemen. Ubicado sobre el golfo que lleva su mismo nombre, Adén mira hacia las desoladas costas del Cuerno de África, que le quedan a menos de 150 millas náuticas de distancia. Es el primer puerto que existió sobre el planeta. Allí fueron enterrados Caín y Abel, y construida el Arca de Noé, o al menos así está escrito; allí Arthur Rimbaud comerció con café, traficó con armas y renunció a escribir versos. Por las ventanas del jeep sólo vemos arena. Estamos en medio de ese mismo desierto yemení que en la historia antigua se tragó al ejército romano de Aecio Galo. Y de repente, como salida de la nada, aparece la reina de Saba. Es ella, no hay duda. Pero no la legendaria, sino la de carne y hueso. Y no la real, de realeza, sino la real de realidad.

Viene descalza, en medio de un grupo de 15 o 20 caminantes. Flaubert la imaginó vestida en brocado de oro con faralaes de perlas, azabaches y zafiros, pero no es así. Trae la ropa hecha jirones, arena en la boca, la mirada ausente y el cuerpo quemado por el sol y la sal. Se diría que es etíope por el color de su piel, que llaman nilótico en la suposición de que el tono, de un dorado tostado, es el mismo que el de las aguas del Nilo. Le preguntamos hacia dónde va. "A Arabia Saudí", responde. Pero no tiene brújula, ni guía, ni fuerzas, y no sabe que camina justamente en la dirección opuesta.

Como ella, miles de etíopes y somalíes echan a andar desierto adentro a la buena de Dios, o de la mano de Alá, retando a la fatalidad y ahuyentando demonios. Han cruzado el golfo en una de las travesías más arriesgadas e inhumanas que se puedan concebir. Vienen huyendo de la guerra, del hambre y del odio, o como diría Malraux, de las tres caras de la muerte.

Trono de arena. Volvemos a ver a la señora de Saba unas horas más tarde, en la playa, pero esta vez es somalí. Antiguos textos abisinios la llaman Makeda. El Corán la llama Belkis y la presenta "en un trono magnífico". Pero ella asegura llamarse Ayanna, trae un bebé en brazos y está sentada en la arena. Hace parte de los new arrivals, o recién llegados, tras un landing, o desembarco, traídos por los smugglers, o traficantes de personas. Los propios somalíes bautizan su éxodo con estos nombres en inglés; a fin de cuentas, aprendieron el idioma durante los años de dominación británica, una de tantas que han tenido que sobrellevar. También los franceses, los italianos, los rusos y Ronald Reagan saquearon su tierra, la convirtieron en campo de batalla y tras el retiro de las tropas la dejaron sembrada de armas, las mismas que luego fueron desenterradas por los asesinos locales: señores de la guerra, narcos, violadores, tiranos, piratas, clanes enfrentados, milicias vengadoras, smugglers. Hoy, las grandes naciones ni asoman por Somalia; la han dejado librada a la impiedad de su suerte. Nadie puede con ella, ardiente luna silenciosa que a todos espanta. En 1992, cuando ya el exterminio y la hambruna la habían arrasado, el mundo pareció apiadarse y mandó por fin ayuda humanitaria. Con resultados desastrosos: a los siete meses de su arribo, las fuerzas de Naciones Unidas la abandonaban, ametrallando en su huida a población civil desde helicópteros. A todos derrota la indómita Somalia, pero a quien más derrota, castiga y desangra es a sí misma. Me recita Habiba un viejo dicho somalí: "Con mi hermano contra el resto de la familia. Con mi familia contra mi clan. Con mi clan contra los demás clanes. Todos los clanes juntos contra el resto del mundo". Conozco el fenómeno. También yo provengo de un país, Colombia, hundido en un atolladero histórico donde nos devoramos los unos a los otros. No por nada Colombia y Somalia comparten el mismo paralelo sobre el globo terráqueo.

El bebé que Ayanna sostiene en brazos está vivo. Milagrosamente. Pese a estar exhausta y atónita, ella repite una letanía de frases secas, cortas. Dice a quien quiera oírla, o se dice a sí misma, que su niño venía llorando en el barco. Los smugglers le advirtieron que lo tirarían al mar si no lo callaba, pero cómo iba a callarlo, si ni agua tenía para darle. El niño siguió llorando y lo tiraron. Ella se tiró detrás, pudo agarrarlo antes de que se ahogara y nadó con él hasta la costa. Pero en el barco se le quedaron sus otros dos hijos. Luego los encontró, allí en la playa, vivos también. Uno de los refugiados que venían con ella en el barco los había ayudado a alcanzar la orilla.
No todos corren con la misma suerte. Barcos en los que sólo cabrían 30 o 40 personas son atiborrados con 120 o 150, en travesías que suelen durar entre tres y cinco días. Las soportan sin comer ni beber, a rayo de sol, entre orines, heces y vómitos propios y ajenos. A quien se mueva o proteste, los smugglers le descerrajan un correazo por la cabeza, la cara, la espalda, abriéndole la carne con la hebilla metálica del cinturón. Para no ser interceptados por la patrulla costera yemení, los barcos llegan de noche, dan media vuelta antes de alcanzar la orilla para emprender el regreso y en ese momento arrojan al agua su carga humana. En medio de la ciega negrura, algunos se ahogan porque no saben nadar. Otros, porque vienen entumidos tras permanecer tanto tiempo inmóviles y encogidos. Los hay que desaparecen nadando mar adentro, porque en la costa desierta no hay una luz que los guíe. Los etíopes llevan la peor parte. En el barco los hacinan abajo, en la bodega para el pescado, donde no es raro que mueran de asfixia, y una vez en Yemen no se les reconoce status de refugiados políticos, como sí a los somalíes. Por capricho de las convenciones internacionales, los etíopes son considerados simples migrantes económicos, y en cuanto tales pueden ser deportados.

Cuando emprenden el viaje, todos ellos saben del horror que les espera. No sólo lo saben, sino que duran meses juntando los 80 o 100 dólares que les cobran por el pasaje. "En el mar es posible que te mueras", me dice Habiba, "pero si te quedas en Somalia, es seguro que te matan".
Traídos por las aguas. Habiba huyó de Somalia hace siete años, también ella en patera, y hoy trabaja con los equipos de Médicos Sin Fronteras que patrullan la costa yemení a la espera de landings. Socorren a los recién llegados con primeros auxilios, agua, biscuits ricos en proteínas, ropa seca y chanclas de caucho, y les ofrecen transporte hasta un centro médico en la vecina Ahwar, donde podrán permanecer mientras se reponen. Al menos del cuerpo. Del extremo sufrimiento, la desesperanza y la muerte de los suyos, nadie podrá curarlos. Me cuentan que, hace unas semanas, entre los refugiados venía una muchacha muy bella. ¿Acaso no sería ella la reina de Saba? A lo mejor -condesciende Habiba-, pero al llegar a Yemen, los traficantes le impidieron bajarse del barco junto con los demás. Ella gritó, se volvió loca, intentó tirarse al agua, pero la amarraron. Se la llevaron de vuelta para violarla a su antojo.

Hussein, otro de los integrantes de MSF, me habla de la madrugada del pasado 15 de diciembre. "Imposible olvidar esa fecha", dice. "Al llegar a casa me bañé, al otro día me bañé dos veces. Pero por más que me bañe, esa fecha no la olvido. Habíamos salido a patrullar por la costa y hacia las siete de la mañana divisamos siluetas. ¡Landing! Venían como zombis", dice Hussein, "desnudos, con la expresión en blanco. Estaban muy mal, peor que otras veces. No reaccionaban. Al fin uno nos dijo lo que ya sospechábamos, que había volcado la patera en la que venían con otros 130 pasajeros. Atendimos a los vivos, corrimos hacia el mar y a lo largo de la playa fuimos encontrando los cadáveres. Muchos. Conté 57. Entre ellos había niños, adolescentes, mujeres embarazadas. Los cangrejos ya se estaban comiendo sus cuerpos. Los fuimos arrastrando lejos del agua, los tomamos fotos para que después sus familiares pudieran identificarlos, los metimos en bolsas plásticas. Trabajamos hasta que se cerró la oscuridad y no nos permitió seguir haciéndolo. Regresamos a la playa a primera hora del día siguiente y vimos que el mar había traído más cuerpos".


Los tres pisos de tu culpa. Jameelah lleva más de ocho años en el campo de Kharaz y sigue tan enferma como el día en que desembarcó. Las dolencias ya no están en su cuerpo, pero las carga en el alma. Se vino dejando atrás a su madre y a sus cinco hermanos. Trajo consigo a su único hijo, que murió durante la travesía de un golpe que le asestaron en la cabeza. A partir de entonces, tan pronto logra dormirse, Jameelah cae en una pesadilla que la martiriza. Sueña que un yenil, o demonio, la arrastra hacia una construcción de tres pisos donde la somete a juicio. En el primer piso, la condena por la muerte del hijo. En el segundo piso, la condena por abandonar a la madre y los hermanos. En el último piso también la condena, pero al despertar, ella no logra recordar por qué motivo era juzgada esa tercera vez. Jorge, uno de los psicólogos de MSF, le da un cuaderno y le pide "Jameelah, escribe tu sueño". Ella lo hace. Jorge lee y le dice: "Ahora vamos a preparar tu defensa. La próxima vez vas a explicarle al yenil que viniste a Yemen para trabajar y enviarle dinero a tu madre, que no la abandonaste, ni tampoco a tus hermanos, y que a tu hijo no lo mataste tú, lo mataron los smugglers. Dile a ese yenil que no haces nada contra tu familia, al contrario, has intentado darle mejor vida, aunque la posibilidad no esté en tus manos". El sueño de Jameelah se ha seguido repitiendo, pero ahora el yenil la absuelve en el primero y el segundo piso. Sin embargo en el tercero la condena, y ella sigue sin saber de qué la acusa. "La culpabilidad de las víctimas es un pozo sin fondo", me dice Jorge, el psicólogo.

¿Salomón usaba guantes?

Está escrito que Makeda salió de Saba y cruzó el desierto en busca de Salomón, de quien le habían dicho que era un rey sabio. Las sabias están más bien aquí, pienso al visitar el consultorio médico en el campo de refugiados del ACNUR en Kharaz, en pleno desierto, a tres horas por carretera de Adén. Los médicos son dos muchachas yemeníes, la doctora Jazmin y la doctora Leila. Según la usanza en el país, ambas van tapadas con abaya y toca negras de la cabeza a los pies, salvo una mínima ranura por la cual pueden verte, y tú a ellas puedes verles los ojos. Jazmin debe de pertenecer a un clan más tradicionalista que Leila, porque lleva puesto, además, un par de guantes negros que no se quita en público. "No siempre es fácil atender a las refugiadas", me dice. "Si sólo lidiaras con enfermedades, vaya y pase, pero tienes que enfrentarte a algo casi incurable, los prejuicios atávicos".

Yo miro sus guantes, miro el denso velo que le oculta la cara, y no puedo creer lo que estoy escuchando. Afortunadamente, ella, sin darse por aludida, me sigue explicando. Me dice que en el campo hay una somalí destrozada por un dilema. Vivía en Mogadiscio cuando una tarde, al regresar a su casa, fue violada por los seis o siete integrantes de una milicia etíope. No sólo la violaron una y otra vez, sino que la hirieron con cuchillo, le rompieron un brazo de un culatazo y la abandonaron cuando la creyeron muerta. Es lo habitual allí: ultrajar a las mujeres de otro clan es una de las formas que asume la venganza. Alguien la encontró en coma, se las arregló para hacerla ver por un médico, y ella sobrevivió. Pero se convirtió en motivo de shame, vergüenza, para su familia somalí, por haber sido violada por etíopes. Luego se dio cuenta de que había quedado embarazada, y huyó de Somalia por temor a que sus propias gentes mataran a la criatura al nacer. Dejó en casa a sus cuatro hijos, logró cruzar el golfo y se presentó en el campo de Kharaz, pidiendo asilo. Allí, las doctoras Jazmin y Leila le atendieron el parto. El niño, que nació bien, tenía la piel oscura de los etíopes, así que con sólo verlo, cualquier somalí reconocería en él la sangre ajena. Desde Mogadiscio, la abuela le rogaba a la mujer que abandonara en Yemen al niño etíope y que volviera a casa a hacerse cargo de los otros cuatro, que estaban pasando hambre. Ella sabía bien que con el bebé no podría regresar. ¿Qué hacer? Estaba enferma de confusión, de angustia, de soledad. Los dos médicos tomaron el problema en sus manos. Le ayudaron a conseguir trabajo para que pudiese enviarles dinero a los hijos que dejó en Somalia, mientras permanece en Yemen con el más pequeño. Y le asignaron una madre sustituta que cuida al pequeño de tanto en tanto, mientras ella visita a los otros en Moga. Ni el propio Salomón hubiera salido con una solución tan salomónica.

La casa de las mendigas. En el calor lento de las seis de la tarde se fermenta un olor denso y ahumado a cardamomo y canela, a basura, orines e incienso. Estamos ahora en el laberinto de pasadizos de la barriada de Al Bassateen, en las goteras de Adén, donde sólo viven somalíes y half-castes, o yemeníes con sangre somalí. Desde hace un rato alguien me sigue, tirándome de la manga. Es una mujer con un recién nacido en brazos. Es una alyawm, una limosnera. "Vete a casa", le dice Habiba, "tu niño está demasiado pequeño, ¿cuánto tiene de nacido?". "Cuatro días", responde la mujer, "lo parí aquí mismo, en la calle". Nos lleva a donde vive, la casa de las mendigas. Doce o trece mujeres comparten un pequeño patio de tierra y a medio techar. Algunas se ven descarnadas y enfermas, y una de ellas no se mueve ya: espera acurrucada en un rincón, con la boca abierta y los ojos atónitos, a que le llegue la muerte. Syrad, la más enérgica y saludable, nos ofrece té. "En Al Bassateen, mendigar es el único oficio para una viuda", dice. Si le pides limosna a un hombre yemení, se siente en la obligación de dártela. Es musulmán, la religión se lo ordena. Pero si es muy negociante, te pueden decir: "Toma estas monedas, tómalas; pero si me la chupas, te doy el triple".

Le pregunto a otra de ellas qué espera de la vida, y responde que nada. "Recién llegada de Somalia tenía sueños", dice, "porque pensaba que aquí la vida podía ser mejor. Ahora sé que no es mucho mejor. Bueno, sí, tengo un sueño, uno pequeño, el sueño de cada día: que alguien me dé una limosna".

Caminamos luego hasta el famoso Bloque Tres, el sector de las dhillos, o prostitutas. Nos permiten entrar a una de las casas. En realidad es un patio casi igual al de las mendigas, pero en éste las mujeres son más jóvenes y han pegado en los muros afiches de Bollywood. Se envuelven el cuerpo en coloridas futas, llevan los brazos pintados de gena, anillos en los dedos de las manos y los pies, ajorcas en los tobillos y brazaletes en las muñecas. Nos ofrece el té un muchacho depilado y maquillado que parece ser de inferior rango porque las mujeres le dan órdenes. Colocan en torno al patio colchonetas de espuma de caucho, traen pequeños cojines para que Habiba y yo estemos más cómodas y rocían el ambiente con desodorante floral en spray. Ahora sí -escribo en mi libreta-, me encuentro entre las auténticas reinas de Saba, con todo, y almohadones, perfumes y joyas.

Al principio ni mencionan su oficio, pero poco a poco aflojan y van contando las ventajas y los sinsabores de la vida que llevan. "Por aquí es costumbre que te paguen con comida", dicen. "Te invitan a cenar y sales de ahí con el estómago lleno y las manos vacías. Otros te enciman el khat. Algunos clientes sólo piden que les dejes pasar la noche contigo. Se acuestan a tu lado y no hacen nada, salvo mascar khat. Están consumidos por el khat, que a la larga los deja impotentes. No les importa, lo siguen mascando, y nosotras también. Conseguimos suficiente khat para estar alegres, y suficiente comida para mantenernos vivas. Pero rara vez podemos juntar dinero para mandar a Somalia. Una opción mejor es trabajar en hoteles. Los taxistas te llevan hasta los hoteles a cambio de una mamada, y al regreso, igual. Como por aquí es raro ver un billete, los trabajos se pagan en especie. En el hotel limpias los cuartos, tiendes las camas, trapeas los pasillos y estás ahí para cumplir la voluntad del huésped. Cada tanto, el dueño nos lleva a un hospital a que nos revisen la sangre. Cuando caen huéspedes de Arabia Saudí, traen dinero en los bolsillos, y nosotras podemos mandar algo a casa para nuestros hijos".

De repente se enciende la algarabía en el Bloque Tres. Se ha armado la trifulca y de todas las puertas salen mujeres dando gritos. Un cliente quiso volarse sin pagar, la damnificada dio la voz de alarma y ahora corren tras él. Lo alcanzan y le propinan una paliza. Aparentemente, sólo le cae encima una lluvia de puños, pero en realidad le causan heridas con los brazaletes de metal que llevan en las muñecas.

Un televisor y una cama. Es posible que Saná sea la ciudad más bella del planeta. Como sacada de Las mil y una noches, dicen las guías de turismo, y lo compruebas tan pronto atraviesas la vieja muralla por Bab al Yemen y te cae encima todo el prodigio del medioevo oriental. Afuera de la muralla, sin embargo, es otro el cantar: una modernidad destartalada, sucia e inconexa, con Internet lento y tráfico energúmeno. El último rincón de este adefesio urbanístico es la barriada popular de Safía, donde en una habitación sin muebles me esperan 15 mujeres, largas y esbeltas, a punta de hambre. Son algunas de las somalíes que sobreviven en la capital limpiando casas durante el día, y hacinándose de noche con sus hijos en habitaciones como ésta. Van cubiertas como las yemeníes, pero a medida que conversamos, se quitan la ropa negra y debajo aparecen las coloridas telas africanas. Iprah lleva un brazo enyesado; fue atropellada por un coche en las calles de Saná y no logró que la atendieran en ningún hospital hasta una semana después, cuando encontró a familiares que aceptaron pagar su cuenta. Yurop tiene la frente y una oreja quemadas. Hace un par de años intentó quitarse la vida por el medio tradicional de suicidio femenino en su tierra, que consiste en rociarse con combustible y prender un fósforo. Se lo impidieron unas vecinas, sofocando el fuego con mantas de lana.


Está escrito que cuando la reina de Saba se iba acercando a lomo de elefante, bajo su parasol rojo con campanitas de plata y respirando por la boca porque le oprimía el pecho un corsé de pedrería, era tal el esplendor que irradiaba, que la multitud, deslumbrada, se postraba en tierra a su paso. No les pasa otro tanto a las reinas de Safía, acostumbradas a soportar un sonoro "vete al infierno" cuando preguntan si necesitan quien haga la limpieza. "Desconfían de nosotras. Nos acusan de groseras y ladronas, y abusan. El otro día me quejé ante una señora: 'Vigila a tu marido', le dije, 'quiere violarme'. Me respondió: 'Y qué problema te haces, dale lo que quiere, ¿acaso no te pagamos en esta casa?".

Las 15 mujeres están agotadas. Son ya las nueve pasadas de la noche, hace poco regresaron de sus rondas por la ciudad y acaban de alimentar a sus hijos con las sobras de comida que pudieron recoger. ¿Con qué sueñan, muchachas? Les pregunto antes de despedirme, y a coro me responden: "Con una cama y un televisor". Y cómo no, comento, después de semejante jornada cualquiera quisiera echarse en una cama y poner la mente en blanco frente a una pantalla. "No, no es eso". Yurop me explica: "La cama es para encadenar a los niños, ¿entiendes? No nos queda otro remedio. Tenemos que dejarlos solos durante todo el día, y si salen a la calle, cualquier cosa puede sucederles. La única solución es dejarlos amarrados a las patas de una cama. Cuando regresamos a la noche están hechos un desastre, lo primero que hacemos es lavarlos. Están orinados, cagados, lloran a gritos, se han peleado entre ellos, no han comido nada. El televisor es para que se entretengan mientras nos esperan".

La humanidad sólo cuenta con unas cuantas líneas escritas que dan testimonio de la existencia de la reina de Saba: alguna referencia en la Biblia, poco más en el Corán, menciones en textos apócrifos, manuscritos perdidos en alguna biblioteca, un reportaje de André Malraux. Y unas ciertas cartas. También en Safía me entregan una docena de estas cartas. Le sucede a cualquier extranjero que se asome por Kharaz, por Ahwar, por Al Bazateen: sale con los bolsillos llenos de cartas que las refugiadas escriben en inglés y llevan a todos lados en bolsitas plásticas. Están copiadas a mano y van dirigidas a todos, a ninguno, a quien quiera escuchar. Pueden ser escuetas biografías de una o dos páginas, o anuncios de se busca: un hijo perdido en medio de la guerra, un esposo que emigró y no da señales de vida. Puede ser el nombre de una medicina que no logran conseguir para un hermano que se queda ciego, o para una abuela que sufre de los nervios. Puede ser también la denuncia de una violación en tal barrio, de una matanza en tal pueblo. Las más breves son apenas un nombre y una ubicación, me llamo tal, me encuentro en tal lugar. Cada una de estas cartas es un llamado imperceptible, un improbable acto de fe, como el "aquí estuvo fulano" que un desaparecido raya con la uña en el muro de una celda.